ESE ÚLTIMO MOMENTO de Andrea Neiva

 Holi chic@s!!! Cómo lleváis el día? 

Venga que venimos a animaros con una historia preciosa, estamos encantadas y súper agradecidas que Andrea haya contado con nosotras para que le demos voz a su historia.

Es una escritora novel de la que estamos seguras que volará alto, ella es… @andreaneivaescritora.

 Vamos allá, con…

ESE ÚLTIMO MOMENTO

Nuestros Protagonistas son…Victoria y Federico ellos nos harán perder un poco la cordura, son y no son.

¿Destino o casualidad? 

Destino ese que a veces juega a tu favor o en tu contra, ese destino que tira de ellos como si de un  hilo imaginario se tratase y los lleva siempre al principio de su historia, que… por muchos años que pasen ninguno se negara la necesidad de estar juntos y… aunque vayan por distintos caminos este lo sigue juntando.  

Visitaremos países maravillosos uno de ellos es… ¡Londres!

El sonido de unas cuerdas, una canción y unos ojos grises en los que Victoria siempre se pierde, ¡recuerdos!, recuerdos de 20 años atrás.

Ella debe tomar decisiones, Federico el amor de su vida, su amor de adolescencia ellos son fuego, pasión y miedo por parte de él a un futuro juntos, esto siempre los lleva a decirse adiós y Juan Ignacio (Juani), del que me enamore poquito a poco como él lo hizo con Vicky.

Juani es su futuro, su estabilidad, su calma, su refugio.

Victoria está entre dos aguas y aquí está el dilema, ella tiembla con el simple roce de Federico, su piel reacciona sin verlo solo con su simple presencia. 

Junto a Juan Ignacio aprende amar, este la ama incondicionalmente, pero quiere más… Que lo mire, como mira a Federico con pasión y amor, un amor lleno y pleno.

¿Qué pasara? ¿Hará el destino que vuelvan a reencontrarse y darse una oportunidad de verdad con Federico o se quedará al lado de Juan Ignacio? 

Me enamoré de esa palabra portuguesa que lo dice todo (Saudade) no tiene significado, pero expresa un sentimiento, una palabra que le da significado a los recuerdos, momentos... Lo entenderéis cuando leáis su historia.

Siempre vamos a ser momentos…

Me ha encantado, la pluma de Andrea es intensa, nos hemos encontrado con una historia llena de pasión, amor, celos, viajes, decisiones.

Lo habéis leído? A que estáis esperando!!! 

Correr a por uno… Recomendado 100% 

Sinopsis:

Dicen que todas las mujeres tenemos dos amores: el amor de nuestra vida y nuestra alma gemela. La vida de Victoria se balancea ante este dilema, Federico o Juan Ignacio. 

Cuando en la adolescencia vio por primera vez los ojos grises de Federico supo que era el amor de su vida. El primer amor, perfecto en su imperfección y lleno de ilusiones. 

La vida y las decisiones los llevan por caminos diferentes. Cada uno intenta ser feliz, pero el destino insiste en juntarlos. Cada vez que se encuentran se entregan a sí mismos y son víctimas de su amor. 

Como un espejo, el amor nos devuelve diferentes reflejos: Victoria, segura de su amor, y Federico, guiado por el miedo; así se enfrentan y complementan la fidelidad y la falta de compromiso, la sumisión y la posesividad; y los dos acaban presos de los caprichos del destino. ea es intensa, nos hemos encontrado con una historia llena de pasión, amor, celos, viajes, decisiones.

Lo habéis leído? A que estáis esperando!!! 

Correr a por uno… Recomendado 100% 

Sinopsis:

Dicen que todas las mujeres tenemos dos amores: el amor de nuestra vida y nuestra alma gemela. La vida de Victoria se balancea ante este dilema, Federico o Juan Ignacio. 

Cuando en la adolescencia vio por primera vez los ojos grises de Federico supo que era el amor de su vida. El primer amor, perfecto en su imperfección y lleno de ilusiones. 

La vida y las decisiones los llevan por caminos diferentes. Cada uno intenta ser feliz, pero el destino insiste en juntarlos. Cada vez que se encuentran se entregan a sí mismos y son víctimas de su amor. 

Como un espejo, el amor nos devuelve diferentes reflejos: Victoria, segura de su amor, y Federico, guiado por el miedo; así se enfrentan y complementan la fidelidad y la falta de compromiso, la sumisión y la posesividad; y los dos acaban presos de los caprichos del destino.