Hoy venimos con @whitneyg. una escritora que cuanto más la leemos... Más nos gusta!!!
FUE UN MARTES
Charlotte y Grayson, los protagonistas, son dos universitarios que se conocen en su último año. Grayson es uno de los jugadores de fútbol universitario con mucho talento y muchas posibilidades de convertirse en una estrella de la NFL, pero antes, debe graduarse, por lo que le asignan a una tutora para que le ayude.
La tutora es Charlotte, y se encuentran todos los martes en una de las cafeterías favoritas de ella para sus sesiones de estudio y poco a poco se irán enamorando.
Grayson nos ha encantado, es la clase de protagonistas que no es lo que parece en un principio y Charlotte nos ha robado el corazón...
La escritora va narrando pasado/presente, para poder conocer la historia poco a poco, algo que nos encanta... Contada por los dos protagonistas, cada uno bajo su punto de vista.
Una preciosa historia de segundas oportunidades, que nos ha enamorado...
Tiene momentos de ternura, otros divertidos, y también tiene su punto emotivo. Unos protas con un fuerte carácter, mucha pasión y un precioso romance que merece la pena descubrir...
¿La habéis leído? Contarnos... Os leemos...
Sinopsis:
Nos conocimos un martes.
Nos convertimos en amigos íntimos y luego en amantes un martes.
Y todo acabó un martes…
Había tres cosas de Charlotte Taylor cuando la conocí en la universidad que debéis saber:
1. Me odiaba. También afirmaba que yo era «un mandón imbécil con un ego enorme». (Tengo algo enorme, sí. Aunque no es mi ego).
2. Se tomaba las clases de refuerzo de Literatura que me tenía que dar demasiado en serio.
3. Era muy sexy… y virgen.
Al menos, eso era antes de que las clases empezaran a durar más de lo que se suponía. Hasta que un beso inocente se transformó en cien besos profundos, y ella se convirtió en la primera mujer de la que me enamoré.
Nuestro futuro juntos después de nuestra graduación universitaria lo teníamos claro: la liga profesional de fútbol americano para mí y la escuela de leyes para ella.
Pero me dejó al final del semestre sin ninguna explicación, y desapareció completamente de mi vida.
Hasta esta noche.
Nos conocimos un martes.
Nos convertimos en todo y luego en nada un martes.
Y ahora, siete años después, en un martes…
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